Cuando Rodrigo se enoja por alguna situación que para él es de gran importancia, como comer un postre más, no usar los championes que le queremos poner, tener que esperar un rato para bañarse y un largo etc el enojo se transforma en una rabieta.
Rodrigo está cursando el que se supone es el último año de las rabietas ya que según dicen los expertos están van desde el primer año de vida hasta los tres.
Cuando vienen estas rabietas normalmente se lo trata de calmar al instante pero esta vez lo dejamos que desagote toda su energía ya que como se diría en criollo, no hay quien lo calme. Uno de esos días decidí grabarlo y ahora puedo compartir con ustedes el sonido de un niño de tres años enojado.
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