El mirador del Palacio Municipal o más conocido como «El Mirador de la Intendencia» tiene una de las mejores vistas 360 de Montevideo. Durante dos años trabajé frente al palacio municipal por lo que bastante seguido cruce en los medio días para tomar un descanso con buena vista.
Para llegar al piso del mirador se sube por un ascensor que una de sus caras se encuentra por fuera del edificio y al ser de vidrio en el trayecto se pueden ver unas vistas divinas de la costa montevideana.

Vista a lo lejos de los barrios montevideanos donde todavía por suerte los edificios no tomaron la visual.
Una vez se llega y se sale del ascensor hay un hall de bienvenida y al pasar por la puerta que da a la terraza ya podemos ver todo montevideo desde una altura privilegiada (80 metros aprox). Obviamente para evitar algún accidente existen unos vidrios bastante gruesos que dificultan un poco la vista (en especial los parantes que los sostienen) pero al mismo tiempo sirven para atajar el viento y el ruido de la ciudad. También hay que decir que la gran mayoría están muy limpios por lo que al filmar o tomar fotografías no se verá decaída la calidad.

Martin mirando con un dejo de melancolía su viejo y querido barrio, El Cerro.
Para quien no conozca mucho Montevideo hay unos carteles que ayudan a poder identificar los edificios o puntos de interés, yo por diversión siempre trato de encontrarlos por mi mismo sin buscar ninguna ayuda, ver Montevideo desde esa altura también es muy atractivo. Como podrán ver en el video que filme por el año 2017 en los días de gran visibilidad se pueden ver los cerros de Maldonado y se detecta muy fácilmente el Cerro Pan de Azucar de Piriapolis.
Es recomendable ir en primavera y en otoño ya que los colores de los árboles montevideanos en esas estaciones le dan caras distintas pero muy pintorescas. Previo a la pandemia se podía ir todos los días a visitar el mirador pero ahora solo están abriendo los sábados y domingos de 10 a 18 pero además hay que agendar la visita (Aquí el acceso a la web de la reserva). El acceso es gratuito y el tiempo es limitado también, es entendible por la pandemia, pero se extraña el ir en cualquier horario y poder quedarse en una de las sillas comiendo o merendando sin ningún apuro.
Recomendable su visita, seas turista en tu ciudad o extranjero.