Para el primer pilsen rock del año 2003 recuerdo juntar una cantidad de tapitas de cerveza con mi amigo Oscar. Esas tapitas las podías canjear por otras cervezas y por descuentos en el pasajes (no recuerdo bien) para ir hasta Durazno.  La cuestión es que juntamos muchas tapitas y canjeamos muchas cervezas pero por varios motivos no fuimos al Pilsen rock y la espina me quedó clavada. Mi viejo y Luis si fueron y cuando me contaban anécdotas me quería morir, como no estuve ahí. ¡Al próximo no faltaría por nada! 

El viernes previo al Pilsen rock del 2004, eran las 22.50, entraba al trabajo a las 23.00 y ese año tampoco podría ir ya que me tocaba trabajar y no tenían quien cubriera mi puesto.  Nuevamente me quería morir, otra vez me perdería el woodstock uruguayo salvo que esta vez el destino tenía algo preparado para mi… 

En la esquina de mi trabajo me encontré con el pulpo,  un amigo que estaba por salir para Durazno a dedo, ¡a dedo! le dije exaltado, obvio, me contestó y luego me hizo la pregunta que yo estaba necesitando que alguien me hiciera, ¿queres venir? 

Lo pensé 10 o 15 segundos en silencio y la respuesta fue, me cambio y nos vamos.  Fui hasta mi casa y ante el asombro de mi viejo que 5 minutos antes me vio irme a trabajar le dije, ¡me voy pal pilsen! Su respuesta fue, ¿necesitás plata? Luego me dio un abrazo y nos fuimos caminando desde el parque batlle hasta el cerrito a la casa del pulpo.

Hasta ese momento siempre fui muy metódico (lo sigo siendo) pero ese día decidí abandonar todo e irme a vivir el rock and roll uruguayo. 

Hicimos una larga caminata hasta la casa del pulpo muy tranquilos hablando de la vida y fumando un porro. Yo jamás fui de fumar ni cigarros de tabaco ni de marihuana pero en aquella época cuando salía con el pulpo siempre lo acompañaba. Cuando llegamos a la casa me dijo que durmiera un rato en el cuarto del altillo y así hice. En esos años trabajaba durante la noche y durante el día dormía muy poco, tenía 20 años, no me costaba nada. Al despertar tipo las 5 de la mañana el pulpo ya había desmorrugado y guardado su abastecimiento y me dijo, nos tomamos un cutcsa nos bajamos en el puente y de ahí hacemos dedo. 

Amanecía el sábado y nos tomamos el bus directo al puente de Santa Lucía,  cuando nos bajamos y cruzamos el puente caminando el pulpo me sorprende sacando un afiche que decía !durazno! El pulpo siempre va un paso adelante dije, pero unos pocos minutos después nos desayunamos que somos muy malos en geografía. Mientras hacíamos dedo los autos nos tocaban bocinazos y nos hacían señas, se reían pero nadie paraba, a mi me llamó la atención que nadie estuviera haciendo dedo pero igual seguimos unos minutos más hasta que uno paró y nos dijo,  muchachos ¿van para durazno? Es por la ruta 5 y esta es la 1…

¡Nos queríamos matar! El tiempo que perdimos haciendo dedo en la ruta equivocada. Volvimos al puente y nos tomamos otro cutcsa para la ruta 5. Cuando llegamos a los accesos ahí sí, una cantidad de gente haciendo dedo, no menos de 50 personas en un radio de 1k. Recuerdo que le dije al pulpo que esto sería difícil pero él solo me dijo, la sacamos de taquito. 

Caminamos y como a la media hora nos paró un auto con un muchacho que nos dijo que solo nos podía tirar 15k pero para nosotros estaba genial. Nos dejó en una subida y cuando nos bajamos le dije al pulpo que teníamos que caminar delante de toda la gente que teníamos por delante para hacer dedo despejados y así hicimos, metimos pata como si de una maratón de tratara y cuando nos sacamos a todos de arriba el pulpo decide fumar un porro para bajar revoluciones, en ese momento aparece una chica sola que también estaba haciendo dedo pero venía tomando vino, le pidió una seca al pulpo a cambio de compartir el vino y obviamente el trueque fue conveniente para todos. Caminamos un poco más y luego cuando vimos que estábamos como se dice comúnmente “reee locos” decidimos sentarnos y tomar agua para recuperarnos, en ese momento para una camioneta S10 y sin que le hagamos dedo nos dice que nos pueden llevar 20k. No entendíamos nada pero le dijimos que sí y nos subimos de cabeza. Dentro había una pareja con una niña chica (5 o 6 años) y nos comentan que querían llevar a alguien pero no se animaban porque todos estaban fumando y tomando y como nos vieron tomando agua pararon sin que le hiciéramos dedo. En ese momento aguantamos las risas para que no nos bajen pero fue un momento muy cómico.  

Cuando la familia nos dejó caminamos los tres unos 5k hasta que llegamos a la puerta de una casa que estaban escuchando Rata Blanca al palo y le dije al pulpo, hacemos campamento acá, justo era en un alto y yo dije que era el mejor lugar, pero en realidad era por la música. La chica (no recuerdo el nombre) que estaba muy preparada sacó unos refuerzos de salame y nos dio uno para cada uno. Con el pulpo no llevamos ni comida ni agua, solo teníamos porro, éramos inconscientes. Luego de comer y fumar y unos 45 min de espera nos paro un auto negro, entramos, le dijimos muchas gracias y 5 minutos despues los tres estabamos durmiendo. Yo me desperté más o menos media hora después y tenía a la chica durmiendo arriba mio, sin entender mucho que pasaba desperté al pulpo que estaba en el asiento delantero y le dije, ¿a dónde vamos? ¿En dónde estamos? El pulpo le trasladó la misma pregunta al chofer y él respondió, a durazno…

No lo podíamos creer,  nos subimos al auto de un bombero que vivía en Durazno y que por casualidad estaba viniendo desde Montevideo. Aplaudimos al bombero de alegría y nos volvimos a dormir los tres. Cuando estábamos a unos kilómetros de Durazno el bombero nos despertó para que le dijéramos donde nos dejaba si en el parque de la hispanidad o en el centro, nos dejó en el centro. Arrancamos con el amanecer y a las 13:00 nos estábamos bajando del auto en la terminal de Durazno. La chica de la misma forma que apareció nos dio un beso y desapareció, nosotros con el pulpo nos fuimos a disfrutar la ciudad. 

Quedará para otro día cómo fue ver los toques en pleno pogo, dormir en el piso de la terminal sin nada (nos fuimos con la ropa puesta y nada más) y como nos volvimos. Además de otras muchas anécdotas de otros pilsen rock. 

Fue una linda época.